La Iglesia en México convoca a unirse a la Novena al Sagrado Corazón de Jesús

La Iglesia en México hizo un llamado a unirse del 19 al 27 de junio a la Novena al Sagrado Corazón de Jesús, con esta exhortación: “En medio de la violencia, el dolor y la desesperanza, pongamos nuestra vida, familia y comunidad en el Corazón de Cristo. Solo Él puede sanar, unir y transformar”.

En un videomensaje transmitido en las redes sociales de la Conferencia del Episcopado Mexicano, el sacerdote José Luis García Franco de los Misioneros del Sagrado Corazón y de Santa Maria de Guadalupe, aseguró que México es “tierra de María; ella ha conquistado este pueblo para su hijo Jesús, por eso en México exclamamos: ¡Viva Cristo Rey! México aclama con un corazón ardiente al verdadero Dios por quien se vive, que nos trajo santa María de Guadalupe“.

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Detalló que se celebra un año jubilar por los 350 años de las apariciones del Corazón de Jesús a santa Margarita María de Alacoque; “esta celebración está dentro del año santo 2025 ‘Peregrinos de esperanza’, al que nos convocó el papa Francisco -de feliz memoria-. Él mismo nos invitó en la encíclica Dilexit nos, a poner el Corazón de Cristo en el centro de nuestra historia, ya que hablar del corazón es hablar de lo esencial de la vida de una persona de la sociedad y Cristo está en el corazón de la historia”.

“A nuestro México le hace falta paz, le hace falta corazón”

El padre García convocó a los católicos participar en la Novena al Sagrado Corazón de Jesús pues “México sufre hoy violencia, división de las familias, muchos jóvenes van sin un horizonte en su vida, vemos miseria, discriminación, egoísmo; a nuestro México le hace falta paz, le hace falta corazón, volver al evangelio, a Cristo”.

“El día de la Solemnidad, Día Jubilar y de oración por los sacerdotes, consagremos al Corazón de Jesús nuestra diócesis, parroquia, congregación, familia, la vida y el trabajo al Corazón de Jesús. Solo en Él se construirá el reino de Dios, la civilización del amor, solo en Él se repara las ruinas del odio en una sociedad nueva, pongamos nuestro corazón en el Corazón de Cristo, Él es nuestra esperanza, oremos siempre juntos. ¡Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi corazón semejante al tuyo!”, añadió.