“Tuve el honor, la oportunidad, de servir en la mesa a Juan Pablo II”. Es la confidencia que León XIV compartió el pasado domingo en el Colegio Internacional Santa Mónica, durante el almuerzo que compartió con la comunidad agustiniana.
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El papa Robert Prevost se desplazó hasta el lugar, después de celebrar la misa del Jubileo de las Familias, con motivo del cumpleaños del prior de la Orden, el español Alejandro Moral, con el que mantiene una estrecha amistad. No en vano, fueron compañeros de estudios en Roma.
Tiempos de estudiante
Así lo reconoce el Pontífice norteamericano durante las palabras que pronunció ante sus hermanos agustino después de la comida y que han sido difundidas por el religioso colombiano Felipe Romero.
León XIV, durante el almuerzo con los agustinos
En este ambiente familiar, León XIV recordó que “Juan Pablo II comió en este lugar”. “El prior y yo éramos estudiantes, aunque yo era mucho más joven que él”, ironizó Prevost sobre Alejandro Moral, sabedor de que el religioso burgalés es tan solo cuatro meses mayor, provocando carcajadas entre los presentes.
Feliz de compartir
“Le ofrecimos una naranja, él la tomó, pero no la comió. Y nos dijo que la dejó ahí para meditar, para contemplarla”, comentó el Papa actual. “Después, todos jugamos un poco apara ver quien se la quedaba. Finalmente, nos la comimos”, remató la anécdota.
Más allá de este episodio, León XIV añadió que “estoy muy feliz de compartir este momento con ustedes”. “No estoy tan lejos, pero ahora no es siempre fácil llegar. De todos modos, ser Papa no significa olvidar o perder la vocación como agustino. Estoy muy cerca de ustedes y espero poder continuar caminando con ustedes”, añadió.
